Cómo ser más positivo en 4 pasos
“Animo a las personas a ver el autocuidado como algo vivo y orgánico. Tenemos que permanecer abiertos y flexibles y no tratar de hacer las cosas como siempre las hemos hecho.
vanessa joywalker
Coach certificado de vida y liderazgo.
Los últimos años han estado llenos de incertidumbre. Este tiempo turbulento ha desafiado nuestra capacidad de mantener una perspectiva esperanzadora. Aún así, una plétora de investigaciones muestra que el pensamiento positivo beneficia tanto a nuestro sistema inmunológico como a nuestro bienestar mental y físico en general.
Desarrollar una actitud optimista no significa ignorar los problemas de la vida; Se trata de dejar espacio para las cosas buenas que suceden, por pequeñas que sean.
“A veces, la mejor manera de pensar de manera más positiva es encontrar la libertad de participar de manera productiva con todas las cosas complicadas”, dice Vanessa Joy Walker, entrenadora certificada de vida y liderazgo y autora de Make Room for Joy. “Cuando hacemos eso, pueden ver las posibilidades incrustadas en los problemas”.
4 pasos para una vida más positiva
Todos tenemos nuestras propias “cosas complicadas” con las que lidiar, algunas más que otras, y Walker lo entiende. Aquí ofrece cuatro formas en que podemos hacer que nuestra vida cotidiana sea más positiva.
1. Vive el hoy
“A veces estamos tan concentrados en el pasado o el futuro que no experimentamos el presente”, explica. “Estamos constantemente desplazándonos, y no solo en las redes sociales, sino en nuestras vidas, para encontrar las cosas que nos llenan. Pero nos estamos perdiendo lo que está pasando”.
Walker sugiere tomarse el tiempo para identificar las cosas que nos estresan y elegir cómo sentirnos al respecto. Si te tomas solo 15 minutos para escribir estas preocupaciones, puedes aliviar la ansiedad y el miedo, dice ella.
“Abordar el caos es importante, pero establezca límites”, enfatiza. “Siempre digo: ‘Ocúpate de estas preocupaciones, pero no te sumerjas en ellas'”.
2. Practica el descanso
“Todos decimos que queremos practicar más el autocuidado y encontrar más paz. Pero entonces, ¿por qué es tan difícil para nosotros quedarnos quietos?”, pregunta.
Walker dice que usa un cronómetro para recordarse a sí misma que debe tomar breves descansos a lo largo del día. Estos descansos pueden incluir dar un paseo, preparar una taza de té, leer un libro o tomar una siesta breve. “Sin redes sociales ni descansos como algo para marcar en su lista de tareas pendientes”, aconseja, y agrega que el tipo de descanso puede variar según sus necesidades en ese día en particular.
3. Expresar gratitud
“La gratitud es una actitud, una forma de ver la vida”, dice Walker. “Nos permite ver oportunidades en nuestros problemas. Cuando vemos oportunidades, tenemos más esperanza. Y cuando tenemos más esperanza, tenemos una actitud positiva”.
Si bien Walker dice que es importante que expresemos nuestra gratitud tanto como sea posible, reconoce que hacer una lista de las cosas por las que estamos agradecidos puede resultar abrumador o agobiante. En estos casos, está bien devolver la llamada. “Solo puede ser una cosa”, dice Walker. “Es casi imposible no encontrar algo por lo que estar agradecido”.
4. Abraza la flexibilidad
“Cuando las cosas son inciertas, nuestras rutinas y rituales cambian”, dice Walker. “Animo a las personas a ver el autocuidado como algo vivo y orgánico. Tenemos que mantenernos abiertos y flexibles y no tratar de hacer las cosas como siempre las hemos hecho”.
Uno de los beneficios de una actitud más positiva es que puede ser contagioso. Ejemplificar una actitud de esperanza anima a otros a hacer lo mismo.
El significado de “estar ahí”
Otra forma de difundir un mensaje de esperanza es a través de la entrega de obsequios, un acto científicamente probado que es tan beneficioso para el donante como para el receptor. Darle un regalo a alguien le muestra que usted está allí para ayudarlo y eso, a su vez, puede ayudarlo a usted, y a usted, a ser más positivo.
Como dice Walker, “Durante los últimos años, todos hemos experimentado incertidumbre, miedo, frustración y dolor. Ese duelo puede ser la pérdida de un ser querido o el duelo por el pasado, esa (sensación de) “normalidad” que quizás nunca vuelva a suceder.
“Pero cuando te metes en ese lío con alguien y dices, ‘Estoy aquí para ti’, eso es empatía. Y eso puede ayudar a ambos a sentirse un poco mejor”.